TARTA DE ZANAHORIA CON FROSTING DE QUESO Y LIMA
septiembre 05, 2013
CARROT CAKE WITH CREAM CHEESE AND LIME FROSTING
¡Hola a tod@s! Ya estoy aquí de vuelta, después de este parón vacacional. Tenía muchas ganas de volver a escribir y de enseñaros todas las cositas que he hecho, antes de las vacaciones porque durante sólo he podido hacer esta receta que os voy a enseñar hoy.
Cuando realicé esta receta me di cuenta que para cocinar sólo hacen falta ganas y que la imaginación hace el resto. O si no, ya veréis por qué lo digo.
Desde hace dos años, parte de mi familia nos juntamos en Isla Cristina (Huelva) para pasar las vacaciones. Este año vino mi prima Anna de Barcelona que también es una apasionada de la cocina y una estupenda repostera y decidimos hacer una tarta para todos (tampoco éramos tantos). Mi tía Luisa que adora los frutos secos nos propuso que le hiciéramos una con ellos y, como a mí me gusta tanto la de zanahoria, pues decidimos hacer esta tarta de zanahoria con frosting de queso y lima.
Como el horno estaba en casa de mi tía Reyes, nos fuimos para allá de inmediato. Compramos todos los ingredientes que necesitábamos, por ejemplo, los moldes, que no había ninguno y los compramos de los de aluminio (como los que te dan con el pollo asado). Por supuesto, no teníamos casi ningún utensilio de los que disponemos en casa y fue todo muy manual. Si os fijáis en la foto, veréis el batidor de varillas con el que hicimos la masa y el frosting. No estaba en muy buen estado porque se le salían algunos alambres pero dio el apaño.
Con un rallador de queso, rallamos las zanahorias y las nueces, como no teníamos ni mortero, las metimos en una bolsa y le dimos con un cazo de servir sopa. Bueno, aparte de que se las quitamos al pajarito que tiene mi tío José Manuel porque se nos olvidó comprarlas, ¡je,je! Una tarta como quería mi tía con frutos secos y sin ninguno. ¡Menuda la íbamos a liar!
No os he dicho lo del peso... Todos los ingredientes fueron echados a ojo de buen cubero porque no teníamos peso así que, a base de cucharadas y vasitos de yogur (por referencia con otras recetas) nos fuimos apañando.
Por supuesto, del tamizador ni hablamos. Un colador nos sirvió estupendamente aunque tardamos cien años en tamizar la harina y el azúcar glas del frosting. En fin, que nos lo pasamos genial aunque tardamos una eternidad y es que, todos los cacharros que tenemos lo que hacen es ahorrarnos tiempo.
Bueno, aquí os dejo la receta de la tarta. La del bizcocho os la dejo enlazada porque es como la que ya hice hace tiempo. Lo único nuevo es la crema de queso y lima que está estupenda, muy refrescante y que le dio un toque muy especial a este bizcocho.
TARTA DE ZANAHORIA CON FROSTING DE QUESO Y LIMA
Ingredientes:
El bizcocho lo hicimos en tres moldes de 20 cm. para no tener que cortarlo. Podéis hacerlo en uno y luego dividirlo a lo ancho en dos para que salgan dos capas de relleno.
Para el frosting de queso y lima:
400 gr. de queso untar tipo Philadelphia
300 gr. azúcar glas
2 limas pequeñas
Preparación:
- En un bol, batir el queso hasta que esté cremoso.
- Añadir el azúcar glas tamizado poco a poco y batir hasta que todo esté homogéneo. Sin pasarse para que no se nos licue.
- Rallar la corteza de una lima y media (lavada y secada previamente) y mezclarla con una cuchara con el queso.
- El zumo de las dos limas lo vamos vertiendo sobre la mezlca. Dependiendo de cómo lo queráis de ácidito, añadir más o menos cantidad de zumo.
Montaje:
- Rellenamos los bizcochos con la crema y cubrimos la parte superior con el resto. (A nosotras nos quedó un poco corto de relleno, por esos he ajustado las cantidades para que salga más).
- Decoramos con corteza de lima (gracias, Antonio).
Bueno, ahí queda eso. Espero que os guste y os animéis a hacerla. Fue una tarde divertidísima, lo pasamos genial, y espero que pronto, en estas Navidades, volvamos a repetir. Ya os contaré.
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